El riesgo se puede definir
como la probabilidad de ocurrencia de un evento que puede afectar o comprometer
los resultados esperados de una determinada actividad.
En todos los aspectos de la
vida está presente el riesgo, es una situación que no se puede eliminar en su
totalidad, por lo tanto hay que aprender a convivir con ese grado de incertidumbre
el cual tiene diferentes niveles de exposición.
Hay 3 aspectos sobre el
riesgo que siempre se deben considerar y cumplir, para que el mismo sea asumido
por cualquier persona y se pueda realizar una mejor planificación que permita
obtener mejores resultados, estos son:
1.- Debe ser Medible: Es
necesario conocer cual es el nivel de riesgo que hay en cada situación y
cuantificarlo, de esta manera se podrá estimar la potencial ganancia o perdida
asociada con la actividad que se realiza.
2.- Debe ser Aceptable: Una vez
identificado el nivel de riesgo, hay que sentirse cómodo con el mismo, por lo
tanto hay que alinear las expectativas entre lo que se hace y lo que se espera.
3.- Debe ser Manejable: Es
importante poder aplicar estrategias que disminuyan el nivel de riesgo en un
momento determinado, si bien es cierto que no se puede eliminar, es necesario
mitigarlo y estar atento a las variaciones que se presenten en la situación que
esté asociada con el riesgo.
Una vez identificados estos
tres aspectos, se podrá administrar de manera más eficiente la potencial situación
correspondiente, bien sea una inversión, una toma de decisión, un
emprendimiento, la práctica de algún deporte extremo o cualquier otro evento.
RDS
@rduartesandoval
No hay comentarios:
Publicar un comentario