febrero 15, 2011

La Estrategia de Inversión

Todas las actividades que realizamos día a día requieren de un nivel de planificación determinado, algunas con menor o mayor nivel de rigurosidad dependiendo del tipo de actividad que se trate. Si hablamos de educación, la planificación es dada por el sistema educativo que nos indica que pasos debemos seguir para lograr alcanzar la graduación básica, posteriormente viene el proceso de estrategia en el cual definimos que deseamos estudiar a nivel profesional.

Este proceso se repite en diferentes actividades, entre ellas el de las inversiones, el cual a veces no ejecutamos de la mejor manera y por lo tanto debemos aplicar una buena estrategia.

La estrategia de inversión la podemos definir como, el conjunto de actividades, normas y procedimientos que se deben establecer con la idea de conformar un portafolio de inversiones que tenga un adecuado nivel de equilibrio entre riesgo y rentabilidad, acorde con el perfil de cada inversionista, así como la forma en que será administrado para poder obtener un crecimiento sostenido del patrimonio personal o familiar.

Se debe analizar el entorno en el que nos encontramos para determinar en qué productos se puede invertir y en cuáles no. El mismo proceso se debe realizar de cara a las condiciones particulares de cada inversionista, ya que la estrategia variará considerablemente dependiendo de la edad, el objetivo de la inversión, horizonte de tiempo y el nivel de aversión al riesgo.

Es necesario alinear este análisis con las expectativas de rendimiento, ya que están directamente relacionadas, de esta manera se podrán ejecutar todas aquellas acciones que sean consistentes con la estrategia y tener éxito en la misma.

La importancia de plantear una estrategia de inversión adecuada, es que nos permitirá mantener el enfoque en la meta establecida, nos ayuda a crear un compromiso y permite crear normas en cuanto a reinversión de ganancias, determinación del nivel de riesgo y el hacer un seguimiento continuo a nuestras inversiones.

Cada uno de estos pasos debe ser cuidadosamente establecido para que los objetivos sean alcanzados de manera gradual y no se presenten frustraciones en el camino que impidan seguir con lo planificado. Hay que considerar como manejar las ganancias y las pérdidas que se presenten por las fluctuaciones en el precio los activos que se mantendrán en el portafolio de inversiones.

La estrategia puede ser pasiva, aquella en la que se definen los instrumentos en los que se invertirá y el rendimiento obtenido será acorde a lo generado por cada uno de ellos, generalmente hay concentración en pocos instrumentos. O puede ser activa, que permite recomponer constantemente los activos que conforman el portafolio con la finalidad de lograr un rendimiento objetivo determinado previamente, como por ejemplo superar la inflación. En este caso hay una mayor diversificación de los activos que se mantienen en el portafolio.

Independientemente de la estrategia que se establezca lo importante es que se cumplan con las premisas planteadas inicialmente, razón por la cual hay que analizar las metas y necesidades particulares, determinar cuándo y con cuanto comenzar. Como en todo caso de planificación y estrategia, los resultados se observarán en la medida en que transcurra el tiempo, por lo tanto hay que ser consistente con la estrategia, hacer seguimiento a las inversiones, no pensar en ganarle al mercado y mantenerse en constante formación.

RDS

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...